La principal queja sigue siendo la misma: la skin para Android de Xiaomi, MIUI, sigue siendo regular en el mejor de los casos y el software hace que el hardware siga tropezándose, lo que impide que el Mi 11 sea perfecto.
Diseño y fabricación
He dicho antes que el Mi 11 es grande, pero merece la pena recalcarlo. Con un tamaño de 164,3 x 74,6 mm en la parte delantera, es solo un poco más pequeño que el Galaxy S21 Ultra, el móvil más grande de la última línea de Samsung. En defensa de Xiaomi, ha conseguido que el Mi 11 sea impresionantemente delgado con 8,1 mm, lo que sin duda ha ayudado a que su peso esté por debajo de los 200 g, 196 g para el modelo de cristal estándar. Eso significa que, mientras que el móvil sigue siendo indudablemente robusto, al menos nunca va a resultar pesado. Aún así, esto podría ser lo que echara para atrás a muchos (y, por supuesto, lo que les haga comprarlo a otros). Mientras que otras marcas como Samsung, Apple y OnePlus ofrecen un modelo estándar más pequeño con la opción de elegir una pantalla más grande, Xiaomi lo ha apostado todo al móvil grande, así que ten esto en cuenta. Dejando el tamaño a un lado, Xiaomi ha hecho algunos retoques bonitos en el diseño. El más destacable es una pantalla con curvas en todos los lados, y eso significa que hay una curvatura sutil en los cuatro lados del panel. No impacta la usabilidad (como sí ocurre en las pantallas súper curvadas “en cascada”), pero sí que mejora mucho cómo se siente el móvil en tu mano, especialmente al deslizar desde la parte de arriba o de abajo. Incluso los más escépticos (yo soy uno de ellos) disfrutarán con esta novedad. En la versión estándar del móvil, tenemos Gorilla Glass 5 en la parte trasera (con el Gorilla Glass Victus más fuerte en la pantalla), y en Europa lo tenemos en dos colores: Azul Horizonte y, seguramente menos atractivo, Gris Medianoche (en la foto). También hay una versión limitada en cuero. Si tuviera que cambiar algún elemento del diseño aparte del tamaño de la pantalla, seguramente sería el módulo de la cámara trasera. Reconozco los esfuerzos de Xiaomi para apostar por un diseño atrevido, uno que acentúa las lentes en vez de esconderlas, pero tengo que admitir que los círculos y los cuadrados curvos no son de mi gusto, pero puede que sí del tuyo. Merece la pena apuntar que no hay ninguna clasificación oficial de resistencia al agua. Eso no significa que el móvil no sobreviva a un poco de lluvia, pero sí que significa que no hay ninguna garantía de que sobreviva si se te cae a la bañera.
Pantalla
Que el Mi 11 sea un móvil grande es culpa de, o gracias a, la pantalla de 6,81”. Esta pantalla es un panel AMOLED con un bisel pequeño gracias a la curvatura en los cuatro costados que he mencionado antes, y solo está interrumpida por el pequeño agujero de la cámara selfie en una esquina. Con una tasa de refresco de 120 Hz y una resolución WQHD+ (1440 x 3200, y una impresionante densidad de píxeles de 515 ppi), es difícil criticar las especificaciones de la pantalla, y se ve fantástica en la mayoría de casos. Y sí, puedes utilizar esa alta tasa de refresca con la resolución máxima al mismo tempo. Los colores son brillantes y vibrantes, y el contraste también es sólido, mientras que la compatibilidad con HDR10+ asegura que sea capaz también de reproducir vídeo. El único pero es que el brillo máximo sigue siendo bajo. No siempre será un problema, pero me preocupa que, con mucho solo, la visibilidad se resienta. También perjudica el rendimiento HDR, pues los negros se confunden unos con otros a veces. El HDR es bueno, pero seguramente no prefecto.
Especificaciones y rendimiento
No deberías preocuparte en cuanto al rendimiento, pues el Mi 11 fue el primer móvil con el nuevo chipset Qualcomm Snapdragon 888. La versión internacional del móvil viene con 8 GB de RAM, aunque en algunos mercados está disponible la versión con 12 GB. El rendimiento en los benchmarks es perfecto, especialmente en cuanto a la CPU, con las puntuaciones de Geekbench más altas que hayamos visto aparte de la serie iPhone 12. Las puntuaciones de la prueba de gráficos GFXBench puede que te parezcan decepcionantes en un principio, pero ten en cuenta que este es el único móvil en nuestra comparativa con 120 Hz y resolución WQHD+, una combinación que hace que los fotogramas por segundo sean mucho más impresionantes de lo que parece.
Con un rendimiento de benchmarking así de potente, no debería sorprender que, en el rendimiento del día a día, el móvil también sea una fantasía. En mis dos semanas de prueba, nunca experimenté un retardo o una congelación. En cuanto al almacenamiento, el Mi 11 viene con un almacenamiento UFS 3.1 de 128 GB o 256 GB, aunque no hay una ranura para tarjetas microSD, así que este es todo el almacenamiento que obtienes. Eso sí, es un móvil Dual SIM y, por supuesto, es compatible con el 5G en bandas Sub-6 GHz. También es compatible con el último estándar Wi-Fi 6E, además de con Bluetooth 5.2, lo que hace que el Mi 11 sea difícil de superar desde el punto de vista de la conectividad. En cuanto a las biométricas, puede elegir entre desbloqueo facial y sensores de huellas en la pantalla, este último siendo el más rápido y fiable de los que he probado hasta el momento. Atípicamente, este también sirve de monitor del ritmo cardiaco. Lo podrás comprobar en la app Mi Health y un escáner tarda 15 segundos. Si ya tienes un smartwatch o pulsera fitness, dudo que te vaya a servir de mucho, pero si no es así, es muy práctico tener a tu alcance una forma fácil de comprobar tu frecuencia cardiaca.
Batería y carga
Con una capacidad de 4600 mAh, la autonomía de la batería del Mi 11 es, sin muchas sorpresas, decente, pero quizás no tan excepcional como otros elementos del móvil. No tendrás problemas en utilizarlo durante todo un día, pero irá perdiendo batería al final, así que tendrás que cargar el móvil cada día. Eso no es un problema cuando es nuevo, pero ten en cuenta que, con la degradación de la batería, es posible que en dos o tres años no dure tanto. Lo bueno es que las velocidades de carga son fantásticas. Xiaomi vende el móvil con un cargador USB-C de 55W en Europa (mientras que en China, hace como Apple y no incluye el adaptador), y consigue cargar el móvil hasta el 79 % en 30 minutos, mientras que una carga completa no tarda mucho más. El Mi 11 también es compatible con una carga inalámbrica de 50W, pero ten en cuenta que tendrás que comprar el cargador aparte, y Xiaomi todavía no ha confirmado cuánto costará una base de carga compatible para conseguir esas velocidades. La base más rápida que vende la compañía ahora es de 20W. Si no te importan esas velocidades más lentas, el Mi 11 es compatible con cargadores que utilizan el estándar inalámbrico Qi (normalmente más lento a 5W o 10W). También ofrece carga inalámbrica inversa de 10W para auriculares y otros accesorios.
Cámara
El Mi 11 tiene una triple cámara trasera (junto a una única lente selfie), que consiste en una lente principal, un ultra gran angular y una lente macro (por mala suerte, no hay un teleobjetivo, seguramente el gran inconveniente). Aún así, esta configuración de cámara merece la pena por una lente. La cámara principal es un monstruo de 108 MP, con un sensor grande de 1/1,33” y una apertura de f/1,9 que se combinan para permitir que la cámara pueda capturar más luz que la mayoría de sus rivales. También es compatible con estabilización óptica y PDAF para el foco. Aunque hay una opción para hacer fotos con 108 MP, la mayoría de fotos se harán con 27 MP con la ayuda de lentes Quad Pixel, en las que cuatro píxeles son combinados en uno para fotos de menor tamaño para preservar la mayoría de los detalles y la luz. En buenas condiciones de luz, hay poco que objetar a la cámara principal del Mi 11. Los colores son vibrantes, pero realísticos (no hay una sobresaturación agresiva), y las fotos son ricas en detalles, con poco ruido o elementos artificiales. Al hacer fotos con 108 MP sí que se eleva un poco el ruido, aunque también aumentan los detalles y hace que merezca la pena, especialmente en buenas condiciones de luz. Aunque la cámara ofrece la opción de un zoom de x2, es simplemente un recorte digital, sin una lente de zoom auténtica en el hardware. Es conveniente a veces, pero las fotos sufren de una exposición pobre y un contraste agresivo. Si tienes tiempo, obtendrás mejores resultados haciendo una foto normal y cortándola después. El zoom digital llega hasta los 30 aumentos, pero las fotos son tan inestables y granuladas que, en la mayoría de los casos, no merecen la pena. El ultra gran angular de 12 MP y f/2,4 puede que no suene como un paso atrás en las especificaciones, pero me sorprendió la calidad de las fotos, que siguen siendo nítidas y con buena exposición. Inevitablemente, se pierden detalles y cambia el color: la saturación y la intensidad son mucho más agresivas, lo que resulta en unos colores menos naturales. No es el mejor ultra gran angular, pero en la mayoría de los casos no te decepcionará. La última lente en la parte trasera es la cámara macro de 5 MP. Estoy acostumbrado a cámaras macro bastante terribles en la mayoría de los móviles, así que me sorprendió ver que es posible conseguir buenas fotos. Ayuda la inusual inclusión del autofoco, aunque no es perfecto, pero permite fotografiar el sujeto nítidamente. Sin estabilización, las fotos con esta lente también salen algo borrosos demasiado a menudo, y los resultados con poca luz son todavía peores. Al fin y al cabo, la lente macro consigue buenos resultados a primer plano, pero tendrás que ser paciente y estar preparado para trabajar para conseguirlos. Finalmente, yendo a la parte delantera, la cámara selfie es de 20 MP (f/2,2). Las selfies salen algo suavizadas (incluso al desactivar la función que está activada por defecto), pero en general los resultados también son buenos. Tanto la cámara principal como la lente para selfies son capaces de hacer fotos con el modo retrato. No es ninguna sorpresa que la cámara principal pueda detectar el sujeto y los bordes mejor, solo olvidándose algún pelo, mientras que la cámara selfie dejó borroso el marco de unas gafas colocadas sobre la cabeza, nada ideal. El modo nocturno no solo está disponible en la cámara principal, sino también en el ultra gran angular y la cámara selfie. De hecho, no solo está disponible, sino que se cambia por defecto. Como ocurre en los últimos iPhones, el Mi 11 pasa automáticamente al modo nocturno en entornos con poca luz, aunque también tienes la opción de activarlo automáticamente, aunque esta será una versión más lenta y potente. No debería ser ninguna sorpresa que las fotos con el modo nocturno activado en la cámara principal de 108 MP sean impresionantes. Con el sensor grande capturando tanta luz como sea posible, el algoritmo de Xiaomi es capaz de equilibrar la exposición, siempre preservando los colores y evitando desteñir el cielo. La mayor exposición del modo nocturno manual pierde algunos detalles, pero también preserva mucho más la gama de colores comparado con las fotos automáticas. No sé cuál prefiero. Aunque el modo nocturno está disponible tanto en el ultra gran angular como en la cámara selfie, los resultados son bastante menos impresionantes. La iluminación es irregular; los colores, artificiales; y puede notarse un efecto de contraste poco natural. La cámara selfie en particular hace un buen trabajo para salvar fondos con poca luz, pero añade mucho ruido y elementos artificiales en las caras que hace que no merezca la pena. Resultará práctico de vez en cuando, pero no mucho más. En cuanto al vídeo, el Mi 11 puede grabar vídeos de hasta 4K a 60 o 8K a 30 en la parte trasera, o de HD a 60 en la parte delantera. También incluye nuevos modos de vídeo llamados “efectos de película” que te permite hacer cosas como congelar elementos específicos del fotograma o recrear el icónico retrozoom (aquí llamado “Zoom mágico”). Son divertidos, pero complicados de utilizar y, obviamente, muy circunstanciales. Serán ideales para TikTok, sin duda, pero dudo que vayas a utilizarlo para mucho más.
Software
Hasta ahora, me he centrado en el hardware del Mi 11, y el móvil es excelente en este departamento. Por mala suerte, pese a las mejoras de la skin para Android de Xiaomi, MIUI, el software sigue siendo irregular. El MIUI 12 está colocado sobre el Android 11. Desde un punto de vista estético, Xiaomi se ha controlado un poco y la mayoría de usuarios de Android encontrarán la experiencia bastante similar, con poco que objetar cuando cambias un par de configuraciones. Por mala suerte, con el tiempo, las frustraciones se van acumulando. Destacan las notificaciones, que no son para nada fiables. Demasiado a menudo he abierto WhatsApp para de golpe recibir mensajes de hace una o dos horas. Además, es demasiado fácil arrastrar una notificación en forma de “ventana flotante”, lo que hace que termines con una versión pequeña de una app cuando lo que querías es leer un mensaje. A veces, la barra del volumen no aparece cuando estás tocando los botones del volumen, lo que hace que no puedas ajustarlo sin tener que ir al menú de ajustes. Incluso la potente cámara no se libra de la torpeza de su app. Como la mayoría de apps de cámara de Androids, los ajustes están colocados sin sentido: ¿por qué la lente macro está escondida en el menú de relación de aspecto, y no con los otros modos de cámara? Todavía más frustrante es que, por defecto, la cámara hace fotos con la relación de aspecto “Full”, lo que significa “Full screen” (pantalla completa) y no “Full photo” (foto completa), y de hecho recorta tus fotos a 20:9 para que se ajusten bien a la pantalla, lo que te deja con unas fotos muy estrechas y un campo de visión muy pequeño. Asegúrate de cambiar a 4:3 si quieres usar toda la cámara. El móvil también viene con una variedad de apps de Xiaomi preinstaladas, algunas de las cuales pueden desinstalarse y otras no. Pero ve con cuidado. Desinstalé la app Mi Health y luego me di cuenta de que no está disponible en la Play Store, así que no se puede reinstalar a no ser que recurras a una apk. Es también algo desconcertante que la app Disney+ tampoco esté disponible para este móvil en la Play Store, aunque no sé si es culpa de Xiaomi o de Disney. La mayoría de estos problemas son leves y fáciles de pasar por alto, pero no deberías tener que afrontarlos cuando el móvil cuesta 749,99 €. Es por esto que recomendaría antes comprar un móvil de Samsung, Google o OnePlus y, por supuesto, un iPhone.
Precio y disponibilidad
El Mi 11 cuesta 749,99 € con 128 GB de almacenamiento, y 799,99 € por el modelo de 256 GB. Es tan poca la diferencia que recomendaría gastar un poco más, especialmente porque no hay posibilidad de expandir el almacenamiento. Este precio hace que el Mi 11 cueste algo menos que el Galaxy S21 (859 €), el iPhone 12 (909 €) o el OnePlus 8 Pro (909 €), que pronto podría ser reemplazado por el OnePlus 9 Pro. Solo en especificaciones, el Mi 11 supera a todos esos en relación calidad-precio, así que la experiencia con el software es lo único que debería hacértelo pensar bien. Consulta nuestra clasificación de mejores móviles para ver más opciones.
Veredicto
El Mi 11 tiene un hardware fantástico para este precio. El chipset más rápido, una bonita pantalla y cámaras potentes vienen incluidas dentro de un bonito diseño industrial. Algunos echarán en falta la clasificación IP, aunque para mí el gran inconveniente es que hayan optado por una lente macro y no un teleobjetivo, una autonomía de la batería solo decente y una experiencia de software que no está a la altura de sus rivales.
Lista de especificaciones
Sistema operativo: Android 11 con MIUI 12Procesador: Qualcomm Snapdragon 888 (5 nm)Tarjeta gráfica: Qualcomm Adreno 660Memoria RAM: 8 GBAlmacenamiento: 128 GB | 256 GBPantalla: AMOLED WQHD+ de 6,81 pulgadas (120 Hz)Cámara trasera: Cámara triple de 108 MP (f/1,9, 1/1,33”, PDAF, OIS) + 13 MP (ultra gran angular, f/2,4) + 5 MP (macro, f/2,4)Cámara frontal: Cámara de 20 MP (f/2,2)Conectividad: WiFi 6E, Bluetooth 5.2, 5G, Dual SIM, sensor de huellas en pantalla, altavoces estéreoBatería: 4600 mAh (carga rápida de 50W, carga inalámbrica de 55W y carga inalámbrica inversa de 10W)Dimensiones: 164,3 x 74,6 x 8,1 mmPeso: 196 gColores: Azul Horizonte | Gris Medianoche
